sobre el ARTE

“I never did anything out of the blue”

Ashes to ashes - D. Bowie


Quiero saber cuándo, por qué una obra de arte es considerada como tal. ¿Existe algún patrón, alguna forma que llenar, o queda a puro y exclusivo dominio del espectador?

Creo que me anoté en Historia del Arte con la intención de descubrir algunas cosas, ésta puntual entre las más significativas.

Ya sé que me van a decir que arte es lo que uno considere como tal. Bien. ¿Cómo sé que estoy haciendo la consideración correcta, adecuada? ¿Cómo sé que no se trata solamente de mi subjetividad más exacerbada intentado elevarse y mostrarse detrás del manto de una observación “concreta”?

Si, en efecto, el arte (y la consideración de cuestiones relacionadas para con él) lo es de modo subjetivo: ¿Por qué se insiste –insistimos- en guiar este recorrido? ¿Por qué hacer cursos de crítica, de apreciación, de contemplación, de discusión, si al fin y al cabo todo va a parar al tacho reduccionista de la subjetivad?

En este punto, y en otros, quiero detenerme en este momento específico, RIGHT HERE RIGHT NOW de mi vida.

Porque el arte, como abstracción, como entidad no material, como un colectivo tan amplio, me está afectando. Y no sé si dejarme afectar o intentar aplicar un filtro.

Quiero saber por qué después de leer a Benjamín no pude llegar a conclusión alguna, si la reproducción de la obra de arte es una obra de arte en sí.

Me falta leer, mi ignorancia es vasta con respecto a este y a infinitos otros temas, pero quiero SABER.

Una para con el mundo, el entendimiento, ser parte activa de esa energía universal que hace que todo esté interconectado, que todo dependa de lo demás y de nuestra relación con ello, con ese “afuera” que nos afecta, nos moldea, nos indica, suprime o deprime, dependiendo de las circunstancias particulares, de los momentos históricos, de las objeciones y digresiones, pros y contras de la capacidad conciente –o no- del discernimiento.

¿Hasta dónde ser autodidacta en la contemplación/admiración del arte, y desde dónde ser un sabedor, un erudito?

Y

¿Cómo se es parte activa de ese arte circundante? ¿Realizador, observador, crítico, material permeable a ser conmovido?

Como se puede ver, excesiva cantidad de preguntas que no sé si obtendrán respuesta alguna vez.

¿Por qué ese epígrafe?

Porque nunca hago cosas de la nada, me falta ese carácter espontáneo, de quien hace las cosas como se las dicta la tripa. Me falta disfrute de pequeñas cosas, de momentos, y quiero que eso cambie. Y tal vez dar un enfoque particular a esto que se da en llamar ARTE, no tan pormenorizado ni perfecto, pueda ayudarme a sentir, más que a racionalizar, los pensamientos y sensaciones surgidas a partir, de por ejemplo, la contemplación de un Picasso, lectura de un Borges, la escucha de un Coltrane, la mirada a un Citizen Kane, o lo que sea que pase ante mis sentidos.

El juego se abre.

Espero poder jugarlo plenamente.

Con todo mi corazón.